La brújula del Badajoz en la temporada que acaba de concluir, Sergi Maestre, se ha convertido en la primera renovación de los blanquinegros para la temporada 2020-2021, en la que el objetivo volverá a ser pelear por el ascenso al fútbol profesional. A pesar de haber sufrido alguna lesión durante el curso, el centrocampista catalán ha sido una de las piezas indiscutibles tanto en el esquema de Mehdi Nafti como en el de Pedro Munitis. La continuidad del técnico es la gran incógnita en los blanquinegros, que confían en volver a contar otro año más con el entrenador, aún con contrato.

Sergi Maestre llegó el pasado verano al Badajoz con la vitola de futbolista top en la categoría y ha cumplido ampliamente con las expectativas. Nacido en Barcelona el 18 de noviembre de 1990, se formó en La Masía, la cantera del Barça. Antes de recalar en el Nuevo Vivero ya tenía una amplia experiencia en Segunda División B, categoría en la que había pasado por las filas del Lugo, Zaragoza B, Celta B, Badalona, Olot, Cornellà y Murcia.

El Badajoz le definía como un pivote defensivo que destaca por su capacidad de leer los partidos, gran anticipación, buen juego aéreo y su confianza y seguridad con el balón en los pies, cualidades todas que ha demostrado con el conjunto blanquinegro, que comienza con él a armar el proyecto para el próximo curso.

En ese proyecto no seguirán ninguno de los siete cedidos, que ya han vuelto a sus clubs (Garrancho, Fobi, Kike Pina, Julio Gracia, Isma Cerro, Chris Ramos y Steven Prieto. Tampoco Alfonso Candelas, Toni Abad de Djak Traoré.