Sergio Moya (Elda, Alicante, 30 de agosto de 1995) vuelve a la UP Plasencia. El guardameta levantino es la primera piedra en el pilar que ha puesto el renovado Luismi en el cuadro blanquinegro. El jugador retorna a la que fue su casa, en la que fue unánimemente muy bien valorado, antes de marcharse el pasado año al Atléitico Paso canario y después volver a la región, en concreto al Moralo, reclutado por José Diego Pastelero y con la intermediación de Aarón, con los que coincidió en la UPP con anterioridad.

Moya, confirmado este jueves como primer fichaje del club extremeño, arrastra tras de sí una trayectoria llamativa con muchos equipos a sus espaldas, pese a su juventud, entre ellos el Elche o el Hércules, en las categorías inferiores, así como el Real Madrid, también siendo prácticamente un adolescente, Las Rozas, el Oviedo o el Fuenlabrada antes de empezar su periplo por dos equipos de Extremadura.

«He crecido mucho como futbolista y como persona, dejo muchos amigos aquí», revelaba el portero en declaraciones a este diario justamente hace un año. Ahora podrá recuperarlos en el día a día en Plasencia. El proyecto de la UPP se relanza con un nombre de prestigio, el de un portero que dejó huella en la ciudad y que puede ser considerado como uno de los mejores en su puesto en la categoría.

El proyecto del Plasencia para la próxima campaña parece con esta noticia reforzado, ya desde que fue reelegido para la presidencia José Antonio Quijada. La entidad quiere hacer un proyecto más ambicioso y en el que los problemas económicos no lo marquen todo, como ha sucedido con frecuencia en las últimas campañas.