SEVILLA - 3: Palop; Mosquera, Squillaci, Escudé, Adriano (Dragutinovic, m.72); Jesús Navas, Duscher, Renato, Diego Capel (Perotti, m.57); Luis Fabiano (Romaric, m.77) y Kanouté.

MALLORCA -1: Moyà; Scaloni, David Navarro, Ramis, Ayoze; Martí (Mario Suárez, m.27), Cléber Santana; Varela (Webó, m.61), Jurado, Arango; y Aduriz (Keita, m.74).

GOLES: 0-1. Min.16: Aduriz; 1-1. Min.32: Kanouté, de penalti; 2-1. Min.60: Luis Fabiano; 3-1. Min.76: Jesús Navas.

ARBITRO: Pérez Lasa (Comité Vasco). Amonestó a los locales Diego Capel, Duscher y Escudé, y a los visitantes Aduriz, Ramis, Scaloni y Mario Suárez.

El Sevilla casi se aseguró su objetivo de finalizar la Liga entre los cuatro primeros, tras remontarle al Mallorca el gol inicial de Aduriz, que quedó sin efecto merced a la igualada de Kanouté, de penalti en la primera parte, y de Luis Fabian y Navas, que sentenciaron en la segunda.

Se adelantó el Mallorca apenas superado el cuarto de hora, cuando ya se había acercado un par de veces con peligro al área sevillista, y lo hizo por mediación de Aduriz, que se deshizo de Escudé con una hábil maniobra en el área y batió de tiro cruzado a Palop.

La igualada se rozó poco después, pues el Mallorca era incapaz de salir de su parcela, con nuevo disparo al palo de Luis Fabiano, quien a la media provocó un penalti tras un forcejeo con Iván Ramis. Kanouté lo transformó con una magistral paradinha que devolvía las tablas.

REACCION El inicio de la segunda fue parecido al del encuentro, con un Sevilla más contemplativo y temeroso de los posibles contragolpes de un Mallorca que amagaba sin dar. Para refrescar a su frente ofensivo, que daba muestras de cansancio, Jiménez introdujo a Perotti en el puesto de Capel y el primer balón que tocó el argentino terminó en pies de Luis Fabiano quien arremetió contra la defensa balear para plantarse ante Moyà, al que batió con un zurdazo por bajo.

Goyo Manzano quiso reaccionar con la inclusión de dos delanteros como Webó y Keita pero en los jugadores del Mallorca parecía pesar el hecho de tener la temporada amortizada, de modo que apenas si se acercaron a los dominios de Palop.

Estaba más cerca la sentencia sevillista que una nueva igualada y, en efecto, ésta llegó por medio de Jesús Navas, el más incisivo de entre los locales, que rompió a Ayoze con un quiebro en el pico derecho del área grande y largó un zurdazo que se coló por la escuadra contraria.