El Sevilla afronta el partido de ida de la Supercopa de España (21.30 horas, La 1) con la esperanza de lograr un resultado de garantías para viajar con comodidad a Barcelona. El equipo catalán decidió no contar con ninguno de los internacionales españoles e improvisará una alineación de circunstancias ante un conjunto hispalense que se presenta ante su afición con el objetivo de lograr un nuevo título y mirando de reojo la eliminatoria de la fase previa de la Liga de Campeones.

El Sevilla tendrá un equipo más rodado, ya que comenzó la pretemporada con mucha más antelación que los azulgranas. Podría contar con un once titular de garantías y con el que Antonio Alvarez se jugaría el inicio de la temporada. El lateral izquierdo Fernando Navarro se queda fuera de la convocatoria por una elongación en el recto anterior. También serán baja Dragutinovic, Guarente y Acosta.

El Barcelona llegará con lo justo, hasta el punto de que Pep Guardiola echará mano de uno de los metas del filial (Oier o Miño) para sustituir a Valdés y al lesionado Pinto. Los problemas en la portería no son los únicos que se le manifiestan al técnico, que decidió no forzar a ninguno de sus internacionales españoles, a pesar de que por ejemplo Puyol y Busquets dieron muestras de tener un estado de forma óptimo en el amistoso que jugaron el miércoles con España en México.

Lo que debería ser una fiesta para arrancar la temporada, la Supercopa de este año se presenta en el calendario como un problema.