Sevilla y Liverpool se encuentran en el Sánchez Pizjuán en la quinta y penúltima jornada del grupo E de la Liga de Campeones, cita a la que acuden con la intención de dar un paso importante hacia los octavos, en el caso del conjunto local matemático si gana.

Eso le da al partido un atractivo añadido al que ya tenía cuando ambas formaciones quedaron emparejadas en la fase de grupos y fueron considerados como favoritos a ocupar los dos primeros puestos y superar así la fase.

Al choque llegan ambos separados solo por un punto en el grupo -a favor del Liverpool- e igualados en el caminar por sus respectivos torneos domésticos -quintos con 22 puntos en doce jornadas-.

El entrenador sevillista, el argentino Eduardo Berizzo, saldrá con todo y para ello ya reservó el pasado sábado en la visita del Celta (2-1) a jugadores que quiere en perfectas condiciones, como son tres de sus compatriotas, el defensa Gabriel Mercado, el centrocampista y organizador del equipo Éver Banega y el mediapunta Joaquín Correa.

Del partido ante el Celta salió lesionado el lateral derecho francés Sébastien Corchia, pero, independientemente de su recuperación, ese lugar lo ocupará Mercado, mientras que el buen partido de Manuel Agudo Nolito, con gol incluido, le podría mantener en el extremo izquierdo en detrimento de Correa.

El Liverpool, por su parte, se presenta en Sevilla en su mejor momento de la temporada, después de encadenar cuatro victorias consecutivas en todas las competiciones y con los llamados 4 fantásticos -Mohamed Salah, Philippe Coutinho, Sadio Mané y Roberto Firmino- recuperados, en forma y brillando.