Su amor es el fútbol, pero el faranduleo ha llegado a su vida en primavera. Miguel Ángel Macías (Mérida, 1994) es jugador del Atlético Pueblonuevo y recientemente ha participado en el conocido programa ‘First Date’, donde ha causado furor en las redes. Su parecido con Sergio Ramos, su desparpajo ante las cámaras y su forma de ser, dieron mucho juego en este espacio televisivo presentado por Carlos Sobera.

«Fui a buscar una experiencia, me dio por eso y me planté allí. Me lo pasé genial, me trataron muy bien y me han dado mucha bola. Los compañeros de equipo lo sabían y todos los días me preguntaban cuándo iba a salir. El pasado lunes emitieron el programa y pilló al equipo entrenando y a mi trabajando, fue un descojone al ver el teléfono», narra el jugador.

El amor no triunfó, la distancia fue una barrera. «No he vuelto a ver más a la chica. Ella es de Málaga y yo de Mérida, hay muchos kilómetros. Además, ella es muy joven y yo buscaba otra cosa», asegura Macías, quien reconoce que no descarta acudir a más programas televisivos. Le gusta la cámara, el micrófono y sobre todo el balón.

Parecido físico a Sergio Ramos y también posicional, actualmente juega de central en el equipo de Santi Amaro. Su trabajo habitual: animador y bailarín en fiestas, ferias y demás eventos sociales. «Llevo desde los 15 años currando, tengo mi clientela y mi experiencia. El trabajo en la noche y el fútbol lo compagino bien, ya estoy acostumbrado. En el campo rindo», confiesa Macías, que alterna la tarima con el verde.

«Hay muchos sábados que trabajo hasta las tantas, en muchos partidos he tenido que ir de empalme. Sinceramente, a los partidos que acudo descansado, me cuesta más a la hora de jugar. Santi Amaro me comprende, el baile es mi trabajo», confiesa el central del Pueblonuevo, que flirtea con el descenso.

Alarma y escenario

A pesar de ser extrovertido, reconoce que se sintió «impresionado» por los focos del programa de Cuatro. Además, le resulta más difícil subirse a un escenario que calzarse las botas y pisar el verde. «Bailar es más difícil, la gente está allí pendiente de ti. En un campo de fútbol no tengo miedo a nada, que me insulten o critiquen me pone y hace que me crezca», señala el protagonista.

El Atlético Pueblonuevo tiene puesta la alarma. Si falla, el descenso no perdona. Una alarma, la del móvil, en ocasiones juega malas pasadas. «Es cierto que me he quedado dormido dos veces, pero es que no he escuchado la alarma. Me cuesta madrugar, sí, pero en el campo rindo», se defiende Macías de las acusaciones de sus compañeros.

Es el ‘showman’ del club rojillo. Pieza clave, tanto en el vestuario como en el verde. “Soy quien pone la música en el vestuario y el míster cuando van las cosas mal, me pide que anime al equipo. Nos hemos metido en el pozo, pero saldremos de ahí. Por calendario, la permanencia depende de nosotros mismos, si ganamos nos da igual lo que haga el resto de equipos», vaticina. La primera de las seis finales, este domingo ante el Aceuchal.