Acaba el Campeonato de España de categoría infantil y cadete de selecciones autonómicas, que ha llenado Cáceres de baloncesto de futuro durante la última semana. El cierre de ayer estuvo a la altura de las colosales cifras (1.200 participantes, 5.000 visitantes en total y un impacto económico estimado en dos millones de euros en la ciudad) y las fenomenales sensaciones que han ofrecido muchos de los equipos. Los Gasol, Calderón, Rudy y Amaya Valdemoro tienen sucesores.

En el cuadro de honor quedarán los triunfos de Cataluña (infantil femenino), Madrid (infantil masculino), Canarias (cadete femenino) y Andalucía (cadete masculino). En el papel extremeño contrasta en éxito organizativo --aunque con los lógicos desajustes en un torneo de esta magnitud-- con unos resultados deportivos más bien discretos, en los que solo se salvó el sexto puesto del equipo cadete masculino. La selección cadete femenina fue decimoséptima y las dos infantiles, decimosextas.

Nombres propios

Con gran ambiente en el Pabellón Multiusos se disputaron las últimas finales. A los numerosos rostros conocidos del baloncesto nacional que se han acercado estos días a Cáceres se unió el de José Luis Sáez, presidente de la Federación Española que volvió a recordar su condición de extremeño. "Siempre tengo que recordar que nací en Badajoz y viví allí hasta los once años. Es un gran orgullo para mí que este campeonato se haya disputado aquí y que haya estado tan bien organizado. Muchos de los jugadores también han estado a un gran nivel", afirmó.

Se refiere a valores como la catalana Balart (19 puntos y 23 rebotes en la final infantil), la madrileña Elena de Alfredo (26 puntos), la canaria Farah Suárez, los madrileños Francisco Jiménez y Alvaro Lleida y, sobre todo, las dos joyas de Andalucía cadete: el senegalés Malick (14 puntos y 15 rebotes ante Castilla y León) y el brasileño Rafael Freire, cuyos mates, con 1,86 y teniendo 15 años, dejaron a todos atónitos.