Si estaban cantadas las dificultades para ampliar lo que nadie ha conseguido hasta ahora a tres Eurocopas consecutivas en una etapa de transición como la que vive la selección española, el patinazo ante Georgia en el último partido de preparación en Getafe ha venido a multiplicarlas por más que unos y otros, empezando por el seleccionador, insistan en que no es para tanto.

Vicente del Bosque cumplió con su obligación y aseguró que una derrota tan inesperada, después de la imagen esperanzadora en los dos amistosos anteriores ante Bosnia y Corea del Sur, no puede afligir a nadie ni sembrar temor o dudas entre los jugadores que se disponen a afrontar un reto tan exigente como el de revalidar el título europeo en unas circunstancias que se han revelado más complicadas de lo que se suponía por el potencial de los principales candidatos a desbancar a 'la Roja'.

VÍCTIMAS DE CUALQUIERA

Nadie puede quitar a estas horas de la cabeza a los protagonistas que cayeron ante la selección número 137º de la clasificación FIFA, justo por debajo de Tanzania y por encima de Azerbaiyán, que con ese espíritu, con ese despliegue tan previsible ante un rival encerrado y esa falta de recursos para encauzar la reacción, pueden ser víctima de cualquiera.

Y los rivales del grupo que ha tocado para empezar no son cualquier cosa si se les compara con el equipo georgiano, más sorprendido que nadie con su triunfo en Getafe. Ganaron con un gol en su único tiro a puerta en todo el partido tras un contraataque propiciado por un episodio de exceso de confianza de Jordi Alba que continuó con un error de Ramos.

La República Checa, Turquía y Croacia habrán tomado buena nota, lo mismo que los grandes favoritos, aunque gente comoJoachim Löw, el seleccionador de Alemania, asegura que lo sucedido no en el Coliseo Alfonso Pérez no hace variar en lo más mínimo su idea de que la selección española parte en la Eurocopa de Francia entre los "absolutos favoritos”.

Los titulares de 'L’Equipe' -"Una España cobarde"-, de 'The Sun' -"Una selección pequeña causa uno de los grandes impactos del fútbol"- o de 'La Gazzetta dello Sport' -"KO de Del Bosque a seis días de la Eurocopa"- no le dicen nada al técnico alemán, que, después de admitir que no había visto el partido, subrayó que este borrón no puede menoscabar el prestigio y potencial de un equipo "que tienejugadores del más alto nivel y unas señas de identidad que han marcado una época en el fútbol".

OCHO TITULARES

Palabras que agradecerá sin duda Vicente del Bosque a su llegada a la Isla de Ré, donde a última hora de la tarde aterrizaba la delegación española para quedar concentrada y empezar a preparar su estreno en la competición, el lunes que viene a las tres de la tarde en Toulouse contra la República Checa. Agradecido pero mosqueado por el pobre rendimiento de un equipo que, aun con las ausencias en la formación inicial de Iniesta y Silva, empezó con siete u ocho titulares, contando con la incógnita en la portería.

"Queríamos buscar esa mayor confianza, generar un buen ambiente alrededor nuestro y no ha podido ser. Lo que hemos hecho hasta ahora no lo quita el partido de hoy. Hay que analizar lo que hemos hecho y no hay que ser absolutamente pesimistas. Controlamos decentemente el partido y que no hayamos hecho gol es una decepción", afirmó tras el encuentro el seleccionador, que admitió que, con el marcador en contra, esperaba mucho más en la segunda parte: "Estuvimos mal, sin acciones individuales desequilibrantes, sin remate, sin tiros a gol desde fuera. Que nos hagan un gol entra dentro de lo posible, pero que no hagamos ninguno nosotros es una gran decepción... Nos faltaron soluciones, no hemos tenido profundidad y eso es lo más preocupante".

MAL SABOR DE BOCA

Después de tener la noche libre, los internacionales se han reincorporado a mediodía de este miércoles a la concentración de la ciudad deportiva de Las Rozas. A su llegada, Sergio Ramos se esforzó por quitar hierro al mal sabor de boca que ha dejado la derrota ante Georgia. "Nos tiene que servir para aprender, es un pequeño toque de atención y mejor que haya sido antes que el lunes en nuestro primer partido oficial", ha declarado el central madridista, convencido de que el equipo español puede seguir haciendo historia: "Estamos muy ilusionados, nos toca defender el título de nuevo y tenemos que creer que sí se puede. No creo que la gente se haya desmotivado por el partido de ayer. Tenemos casi una semana para trabajar y llegar de la mejor forma posible".