La representación del atletismo extremeño en la Universiada de la localidad coreana de Daewo finalmente se ha visto reducida a una sola representante, Sonia Bejarano. La Real Federación Española de Atletismo y el Consejo Superior de Deportes decidieron el pasado jueves que Pablo Villalobos fuese uno de los dos atletas que no podían viajar a tierras asiáticas.

La RFEA había remitido una lista de 17 atletas que tenían la marca mínima exigida para participar en la Universiada de este año, pero el CSD había estipulado que la expedición de atletismo estaría compuesta por un máximo de 15 deportistas, por lo que sobraban dos. Aunque el ente federativo propuso como solución reducir el número de entrenadores para que pudieran viajar todos los atletas, la oferta no fue aceptada por el máximo organismo del deporte español.

El CSD revisó todas las inscripciones y descartó temporalmente de la lista a cinco de los deportistas, que no cumplían totalmente la normativa de la Comisión de Universidades, en la que se exige participar en el Campeonato de España Universitario y conseguir la marca mínima antes del 19 de julio. Pablo Villalobos se encontraba en ese quinteto, pues su mejor tiempo en los 5.000 metros lisos lo consiguió en el Campeonato de España Absoluto que tuvo lugar en Jerez de la Frontera el fin de semana pasado.

LA DECISION FINAL

La decisión de que el extremeño y Eva Arias fuesen los dos sacrificados se tomó a última hora del jueves y "siguiendo criterios técnicos", según el CSD, que se encargó de comunicar la noticia a los implicados.

Sonia Bejarano es por tanto la única extremeña que viajó ayer a Corea con la expedición española de atletismo, cuyas competiciones se disputarán entre el 23 y el 28 de agosto.