La telefónica alemana T-Mobile seguirá con su equipo ciclista hasta 2010, pese al "golpe y decepción" que han supuesto los escándalos de dopaje, y advierte de que un nuevo caso podría determinar el "fin inmediato" de esa relación.

Así lo indico hoy el portavoz de T-Mobile, Christian Frommert, al término de la reunión de la cúpula de Deutsche Telekom, de la que es filial esa división de telefonía móvil.

Asimismo, los ciclistas del conjunto quedarán obligados por contrato a contribuir financieramente en una especie de "bolsa común", que se destinará a la lucha contra el dopaje.

T-Mobile se propone seguir patrocinando su equipo ciclista hasta 2010, fecha en que expira el contrato, porque no hacerlo sería "un revés" al interés común por lograr un ciclismo nuevo, indicó Frommert.

La telefónica alemana tiene un equipo desde hace 1991, al principio bajo el nombre de Telekom y desde 2004 con el de T-Mobile.

El conjunto estaba en entredicho desde hace meses, después de que quien fuera su capitán, Jan Ullrich, se viera implicado en la trama del doctor español Eufemiano Fuentes.

Frente a todas las pruebas inculpatorias de ADN, Ullrich, único alemán que ganó un Tour de Francia, en 1997, hasta ahora niega el dopaje.

Otros corredores o ex corredores de ese equipo han admitido en cambio haberse dopado, entre ellos el danés Bjarne Riis -ganador del Tour en 1996- y el alemán Erik Zabel, así ahora como el jefe del conjunto, Rolf Aldag.

Antes del Tour de Francia, la dirección de la compañía había advertido con una posible retirada, en caso de nuevos escándalos de dopaje.

En plena ronda francesa, se reveló otro test positivo en sus filas, el de Patrick Sinkewitz, como resultado de un análisis por sorpresa en un entrenamiento. Sinkewitz, quien se retiró del Tour por una caída, acabó admitiendo haberse dopado.