El Imperio de Mérida se encuentra en su peor momento deportivo de los cuatro años consecutivos que lleva en Tercera división, consiguiendo únicamente dos puntos en las seis primeras jornadas. Nadie desde el club esconde que esta racha es por demérito propio, pero también se recuerda que ha habido tres jugadas polémicas que han significado perder seis puntos con dos goles anulados y el polémico libre indirecto dentro del área del pasado domingo que terminó en el empate.

Esta acción encendió los ánimos del entrenador local que, tras tener una acalorada discusión con el árbitro, Pajares Holguín, declaró ante la prensa que "con esa prepotencia y con esa chulería no se puede arbitrar. Es un niñín de papá que cuando van mal las cosas da un paso atrás y parece una ametralladora. Hay que hablar más y no ser tan protagonista". A lo que añadía que "es demasiado chulo para arbitrar y creo que lo mejor es que lo deje y dé paso a chavales más humildes. Parece que le tenga manía al Imperio ya de otros años. Nos tratan como colistas y creo que el Imperio se merece más respeto".

A pesar de las quejas arbitrales, Marrero no escondía que "el equipo tiene que seguir mejorando, aunque ante un gran rival como el Moralo hemos mostrado la actitud correcta, les hemos puesto en apuros y esta es la línea que hay que seguir para en dos o tres jornadas salir de los puestos de abajo".