Exito o fracaso. No hay término medio ni para España ni para Portugal. Su duelo esta noche (20.45 horas, TVE-1) en el estadio José Alvalade de Lisboa será el nuevo drama ibérico. O todo o nada. El triunfador se ganará el pase a cuartos de final y seguirá en el torneo. El perdedor sólo conocerá el linchamiento. La depresión futbolística. Por eso, España y Portugal, dos países con trayectorias decepcionantes en las grandes citas, buscan el éxito que les aleje del derrotismo que siempre les rodea. A España le basta el empate. Portugal necesita ganar. Calidad no les falta a ambas, pero el miedo a la derrota es tan grande que obliga a recurrir a un plus: el carácter.

El equilibrio entre las selecciones es tan evidente que hasta los propios implicados interpretan las estadísticas a su antojo y se las recuerdan, con mala idea, al rival. España hace 23 años que no pierde con Portugal. Un adversario al que, además, derrotó por 0-3 en el último amistoso disputado en Guimaraes.

Pasa a la página siguiente