Amistoso contra Uruguay en Doha (Catar) (19.00 horas, Cuatro) para abrir un año en el que la selección española está obligada a superar los problemas en que la metió Francia con el empate a uno en el Calderón el pasado mes de octubre si no quiere verse abocada a una incómoda repesca para alcanzar la fase final del Mundial de Brasil 2014. Una situación inusual en los últimos tiempos para la campeona del mundo y de Europa, que no puede tomarse ningún compromiso a la ligera. Este contra los uruguayos tiene, además, la significación especial de constituir un adelanto del partido con que ambos equipos abrirán su participación en la Copa Confederaciones el 16 de junio próximo.

Un choque adecuado para preparar la vuelta a la competición oficial en marzo contra Finlandia y Francia, si no fuera por la nueva paliza que supone para los jugadores, que no estarán de vuelta hasta pasadas las siete de la mañana.

JUSTIFICACION El seleccionador, cómo no, volvió a respaldar a sus jefes en la política recaudatoria que siguen. "Tenemos la obligación de jugar en todos los sitios y promocionar el fútbol, sobre todo en los países con menor tradición. Está plenamente justificado el partido aquí porque Catar va a organizar el Mundial 2022", dijo el técnico salmantino, quien también ponderó el valor de la selección uruguaya, actual campeona de América y semifinalista en el último Mundial. Dirigida por Tabárez, Cavani y Luis Suárez son sus puntas de lanza, con Forlán y Stuani en la recámara. "Es una buena ocasión para demostrar por qué fuimos campeones en Suráfrica y en la última Eurocopa", añadió Del Bosque, que igualará a Kubala como seleccionador con más partidos (68).

Un día especial también para Puyol, que cumplirá su partido número 100 como internacional absoluto, con lo que quedará a uno de Torres y a dos de Raúl, que ayer por la mañana se acercó, con sus cinco hijos, a visitar a la selección española. Por la tarde, Del Bosque solo dio pistas buenas sobre la defensa titular, que estará integrada por Arbeloa, Puyol, Piqué y Monreal, con Valdés en la portería. Busquets, Iniesta, Pedro, Cazorla, Mata y Cesc pueden completar la formación titular.

SUEÑO CUMPLIDO El jugador del Atlético Mario Suárez afirmó ayer que "es un sueño cumplido" estrenarse en una convocatoria de la selección española absoluta, pero afirmó que debe seguir trabajando para regresar en un futuro.

"Es un orgullo y un sueño. Entrar en la selección es caro. Hay que hacer las cosas bien. El seleccionador ha decidido contar conmigo y estoy contento de representar al Atlético, que es un club que merece que estemos aquí", comentó el centrocampista.

También habló ayer Alvaro Negredo, que retornará a La Roja tras ausentarse desde la pasada Eurocopa. Aseguró el punta que en ningún momento pensó que se hubiera "acabado" su etapa en el equipo nacional, aunque era consciente de que "iba a estar difícil volver con todos los delanteros buenos que hay".

"No pensaba que se había acabado mi etapa en la selección. Sabía que iba a estar difícil volver con todos los delanteros buenos que hay en esta selección. Mi único objetivo es seguir haciendo las cosas bien para hacerle ver al entrenador que puede confiar en mi cuando quiera", señaló Negredo.