Tiene el mismo desparpajo y descaro en sala de prensa que en el terreno de juego. Con la mayor naturalidad del mundo vivió ayer Carlos Alberto Carrasco, Teto, su puesta de largo en el Cacereño, a donde ha llegado como si de un galáctico se tratara. «Ayer [por el martes, el día que se anunció su fichaje], viendo mensajes en Twitter, el que más me gustó fue el de uno sorprendido por todo el revuelo que se había montado por un jugador de Tercera División», decía antes de que comenzara el acto.

Galáctico o no, ha llegado al Cacereño para hacer lo que le gusta, «jugar al fútbol», por eso asegura no sentir ningún tipo de presión. «Para mí es un orgullo poder jugar en este equipo, es el decano del fútbol extremeño. Yo soy de Cáceres, de la provincia de Cáceres, y me gusta poder jugar en el club más potente de la provincia», dice Teto, que sabe bien a lo que viene: «a ganar, a ser campeón, a ascender a Segunda División B».

Ha firmado por un año con opción a otro si se asciende, «aunque si no subimos también me puedo quedar», dijo él siempre con una sonrisa en la boca. Pero sabe que está es una buena oportunidad para subir y jugar en Segunda B con el Cacereño.

No ha hablado aún con Julio Cobos -«no hay prisa, hay mucho tiempo»-, pero ha llegado al club con la bendición del técnico, como explicó Luis Puebla, director general del club. «No está contento, está lo siguiente», enfatizó el dirigente, que reconoció que Teto era un jugador «deseado» por el consejo de administración, por la dirección deportiva y «por lo que se ve, también por la afición». «Es un jugador bastante interesante para el proyecto de nuestro club, es una pieza muy importante».

Contó Teto que le gusta el equipo que está configurando el Cacereño, con diez futbolistas ya confirmados (Bernabé, Jordi Pérez, Alberto Delgado, Rubén Sánchez, Gustavo Berraco, Rodri, Collantes, Carlos Andújar y Dani Muñoz, además de él mismo). «La temporada pasada era un equipazo y no tuvieron suerte. Ahora están haciendo muchas renovaciones y son buenos jugadores, otro equipazo. Y quedan los fichajes». Entre los que podían llegar, suena cada vez con más fuerza un excompañero de Teto en su etapa juvenil, Juanjo Chavalés, recientemente desvinculado del Mérida.