El nuevo líder del Tour, Thomas Voeckler, dijo tras la etapa de ayer que "llevar el maillot amarillo es lo mejor" que le ha pasado en su vida. "Llevo una temporada muy buena, con triunfos importantes, pero esto es lo mejor que me ha pasado en mi vida. Es emocionante y me hubiera gustado rematar con el triunfo de etapa, pero no fue posible porque me faltaron fuerzas al final. El maillot amarillo es una buena compensación", dijo el campeón de Francia, que, con 25 años lleva sólo tres temporadas corriendo en la categoría profesional.

La joven promesa del ciclismo francés se dio cuenta de que podía ponerse líder "a falta de 60 kilómetros" cuando comprobó que la fuga que compartía con otros cuatro corredores no peligraba de modo alguna por la falta de respuesta del pelotón, "sobre todo por los equipos de los esprinters", dijo. Voeckler lanzó un mensaje para que su equipo pueda encontrar un patrocinador la próxima temporada. "Espero que sirva para que alguien nos apoye", dijo.