No muchos lo saben, pero todo empezó en Plasencia. Uno de los héroes de la época gloriosa del Barcelona y la selección española vivió un antes y un después tras su paso por Extremadura. De acuerdo con que Andrés Iniesta nació en Fuentealbilla y que a los ocho años fichó por el Albacete. Y que la leyenda del hombre que hizo a España campeona del mundo en Suráfrica y que acaba de ganar su tercera Champions asegura que su destino cambió en Brunete, en el Campeonato de Fútbol 7 que organiza José Ramón de la Morena, el impulsor de esa historia no del todo cierta. Porque donde realmente la vida de Iniesta dio un giro fue a orillas del Jerte.

¿Cuándo? ¿En qué momento hubo una conexión entre Plasencia y el exitoso futbolista que cae bien a todo el mundo --incluidos madridistas-- tras el histórico gol de Johanesburgo? La respuesta hay que buscarla del 5 al 7 de julio de 1996, cuando el pequeño Andrés tenía doce años y acudió formando parte del equipo de Castilla-La Mancha al Campeonato de España de Fútbol 7 de selecciones autonómicas que acogió la Ciudad Deportiva placentina. El torneo generó bastante expectación y como suele suceder concitó la presencia de una oleada de ojeadores a la caza de alguna perla.

Uno de ellos era Germán Vaya, conocido en el mundillo del fútbol andaluz como Mani , el hombre del Barça en el sur de España, un auténtico detector de talentos. El fallecido Oriol Tort, considerado el alma de la cantera azulgrana, le llamó para que siguiera a lo que definió como "un niño muy bueno de Albacete" del que simplemente le habían hablado.

Derrotado

Así lo hizo. Por entonces, Andresito tenía un físico endeble, pero ya lucía una calidad superlativa. Destacar tenía más mérito en una selección que no estaba entre las mejores (fue decimocuarta) y que llegó a perder ante Extremadura por 1-0, con tanto de Jorge Troiteiro. Curiosamente, este también vive días felices, como su amigo Iniesta, con el que coincidiría luego en La Masía: acaba de lograr el ascenso a Segunda B con el Burgos.

El título en Plasencia correspondió a Cataluña, que venció en la final a Castilla y León (2-1). En el combinado extremeño --sexto al final-- también estaba Alejandro Vega. "Era muy bueno ya entonces, apuntaba maneras y con el tiempo se ha demostrado lo gran futbolista que es", contó el ahora jugador del Manacor Fútbol Sala (División de Honor) en una entrevista en este diario en el 2008. El emeritense Pichu Cuéllar --actual portero del Sporting y el pacense Guzmán Casaseca --en el Ceuta, rival del Barça en la Copa esta temporada-- eran las otras estrellas.

"Mira, Oriol, yo lo firmo ya mismo. Es pequeñito, no debe pesar ni 30 kilos, pero tiene una visión de juego genial", le dijo Mani a Tort. En el informe también se destacaba que Iniesta no había "empezado muy bien", pero que acabó siendo elegido el mejor del torneo.

A raíz del espionaje de Plasencia, el futbolista manchego fue ya seguido muy de cerca unas semanas después en el más famoso torneo de Brunete, donde se alcanzó el acuerdo para fichar en el Barça por mediación de Albert Benaigues.

El resto de la historia de Don Andrés es conocida: los años en La Masía con la nostalgia de Fuentealbilla, el debut con el primer equipo, el gol de Stamford Bridge antesala de la tercera Copa de Europa, los cinco títulos ligueros como azulgrana, la gloria absoluta del 11 de julio en aquella noche surafricana y, el pasado sábado, otra actuación rutilante en la final continental frente al Manchester United... Quizás nada de eso se hubiera producido de no lucir en aquella competición en Extremadura.