Tomás Bellas no se ve vistiendo de otro color que no sea el amarillo del Gran Canaria la próxima temporada. El base, que comunicó el martes al Cáceres 2016 su pretensión de aceptar la sorprendente oferta que le ha llegado de la Liga ACB, habló ayer con EL PERIODICO con un tono de despedida, dando las gracias a club y ciudad por el trato que ha tenido en la campaña 2008-09, pese a que tiene contrato en vigor y a que el Cáceres 2016 se ha remitido a ese documento firmado para no dejarle marchar.
"Ya he dicho lo que tenía que decir al club y no voy a hablar mucho más. Tengo esta oferta y la he aceptado. Lo siento. Nada más", apuntó Bellas, que enfatizó el "agradecimiento" a "Cáceres y al Cáceres 2016" por la "maravillosa temporada" que supuso su debut en la LEB Oro. "He estado muy bien allí", resumió, sonando constantemente a resumen de lo vivido.
"ESTAN NEGOCIANDO" Pero, ¿y si el Cáceres no le deja marcharse, como indicó en su comunicado público del martes? "No puedo decir nada sobre esto. Están negociando", respondió. Como ya publicó ayer este diario, el club extremeño pide una compensación económica para liberar al jugador, al que considera fundamental en su proyecto. El dinero serviría para atenuar las consecuencias negativas de tener que buscar ahora a un sustituto de sus mismas características que además fuese nacional y asequible financieramente.
El club ya maneja una amplia lista de posibles recambios. Entre los que la pasada temporada jugaron en la LEB Oro y aún están sin equipo hay de todo: desde veteranos (Carlos Marco, los hermanos Vallmajó, Perico Sala...) a jóvenes valores como Gonzalo Sánchez, Javier Mendiburu, Adrián Fuentes o Matías Nocedal (propiedad del antiguo Tau, ahora llamado Caja Laboral). Tampoco sería descartable que se buscase más abajo. No hay que olvidar que la experiencia profesional de Bellas antes de llegar al Cáceres se limitaba a jugar en la LEB Bronce con el filial del Real Madrid.
