CACERES CB 91: Ferrán López (12), Lleal (3), Petrovic (4), Deon Thomas (21), Orenga (4) --cinco inicial-- Hansen (11), Dani García (16), Eslava (2), Bobby Martin (2), Hurl Beechum (16).
GRANADA 80: Ordín (11), Romero (2), Sigalas (17), Wright (30), Guillén (5) --cinco inicial-- Liñán (9), Smith (2), Mesa (2), Zig (2), Manzano.
ARBITROS: Hierrezuelo, Ortego y Guirao. Eliminados: Dani García (min.39), Thomas (min.39), Orenga (min.40) y Sigalas (min.40).
MARCADOR CADA CINCO MINUTOS: 13-13, 18-22, 29-29, 40-40 (descanso) 48-43, 64-58, 70-66 y 91-80.
INCIDENCIAS: Novena jornada ACB.
Redondo. El Cáceres consiguió ayer un triunfo de valor triple en su controvertida carrera por sobrevivir en la Liga ACB: aparte del propio peso del triunfo, se superó al Granada, un rival directo por la permanencia, por una diferencia importante para el basket-average particular (11 puntos) y el resultado otorgará grandes dosis de confianza a un vestuario que esquiva poco a pocas las numerosas dificultades con las que se encuentra. También puede servir para intentar reenganchar a esa afición dormida, pero que tanto disfruta cuando se despierta.
El sabor final del encuentro, con el éxito en el bolsillo y el triple de Hurl Beechum sobre la bocina, es inmejorable, aunque detrás hubo 39 minutos de sufrimiento y dudas. El Cáceres volvió a elegir el camino del tiro exterior para sumar su tercer partido ganado y continuar emergiendo en la clasificación, hundiendo de paso a los granadinos. El equipo estuvo globalmente muy acertado en los triples (12/25, 48%) y también ganó la batalla reboteadora, por mucho que el auténtico Bobby Martin (dos puntos, tres rebotes) siga sin aparecer por el multiusos.
EL DIA DE DANI GARCIA
El hallazgo de la tarde fue Dani García, como otras veces el héroe accidental había sido el ayer titular Joffre Lleal. Los focos se centraron en García, atinadísimo desde 6,25 en los momentos más calientes. Varios triples suyos fueron decisivos, al igual que la inagotable plasticidad de Deon Thomas jugando al poste, el despertar final de Beechum, la complementariedad en la dirección de Ferrán y Hansen o las ganas de pelea de Orenga y Eslava. Como se ve, el Cáceres apostó está vez por una mezcla entre el producto nacional y el de importación: el camino correcto.
El partido fue más vibrante que de calidad. El Granada empezó más acertado (18-22, primer cuarto), con Michael Wright inmenso y Thomas imitándole. El otro duelo de americanos, entre Jabari Smith y Bobby Martin, parecía que era para dirimir quién es el peor de la ACB.
El Cáceres tomó después las riendas en una buena racha de Hansen y García (38-30, min. 18), aunque al descanso se llegase con igualdad a 40. Otro tirón a base de triples y buena defensa sería decisivo en el tercer cuarto: los verdinegros se fueron creciendo y ya nada pudo pararles hacia la victoria, por mucho que una técnica en el minuto final a Ferrán pudiera haberla complicado.
