El portero del Barcelona, Víctor Valdés, reconoció ayer que le sorprendió la suplencia de Iker Casillas en el estreno liguero del Real Madrid ante el Betis, porque, en su opinión, el meta madrileño es "el mejor".

"Sí me sorprendió su suplencia, porque en esta última concentración (con la selección) la he visto bien y en la Copa Confederaciones también lo vi bastante bien. Yo no me cansaré de decirlo: a Iker le he visto hacer paradas que pensaba que no se podían hacer y resolver partidos trascendentales para la selección y su equipo. Para mí, es el mejor", manifestó Valdés tras el entrenamiento de ayer.

DESEO PROPIO El guardameta azulgrana dejó claro que, aunque Diego López es un gran portero, a él le gustaría que Casillas recuperase pronto la titularidad. "Me gustaría verlo en el once, porque siempre me ha gustado enfrentarme a él cuando defiende la portería del Real Madrid", sentenció el meta.

El debate sobre la titularidad o no de Casillas fue algo muy común en todos los mentideros, aunque de las opiniones que se dieron fueron las de Valdés las más llamativas.

EL BARÇA Sobre la actualidad de su propio club, Valdés reconoció que volver a presionar muy arriba, como lo hacía el equipo en la época de Pep Guardiola, será fundamental para que el equipo vuelva a pelear por todos los títulos y que ese es el aspecto en el que está poniendo especial incidencia el nuevo técnico, Gerardo 'Tata' Martino.

"La presión es vital para nosotros. Es uno de los secretos que ha tenido este equipo estos últimos años", ha subrayado Valdés, quien ha apuntado que, gracias a ella, la línea defensiva se coloca mucho más arriba y el equipo tiene más opciones de robar en campo contrario y, por lo tanto, más facilidad para sorprender y crear ocasiones de gol.

Tras la goleada ante el Levante (7-0), Xavi Hernández reconoció que, la pasada temporada, el equipo perdido ciertos automatismos y que dejó de entrenar aspectos tácticos como esa presión en campo contrario.

Valdés quiso matizar las palabras de su compañero: "He hablado con Xavi y me ha dicho que se le malinterpretó. Lo que quiso decir fue que, el año pasado, vivimos una situación por desgracia atípica por la enfermedad del entrenador (el cáncer de Tito Vilanova) y no pudimos trabajar cosas tácticas y otros aspectos como nos hubiese gustado", declaró el guardameta.