Valencia - 1: César, Maduro, Albiol, Marchena, Del Horno, Albelda (Vicente, m.61), Baraja (Manuel Fernandes, m.61), Joaquín, Silva (Míchel, m.61), Mata y Morientes.

Valladolid - 2: Justo Villar, Pedro López, Iñaki Bea, Luis Prieto (Nano, m.46), Marcos, Borja (Vivart Dorado, m.66), Alvaro Rubio, Pedro León, Víctor, Jonathan Sesma y Goitom (Canobbio, m.85).

Goles: 0-1,m.6: Jonathan Sesma. 0-2, m.31: Albiol en propia meta. 1-2, m.73: Marchena.

Arbitro: Fernández Bobalán (andaluz). Amonestó por el Valladolid a Luis Prieto, Jonathan Sesma y Marcos y por el Valencia a Albelda, Morientes y Fernandes. Expulsó con roja directa al visitante Pedro López (m.81).

Incidencias: Partido disputado en el campo de Mestalla ante 30.000 espectadores.

El Valladolid impuso su ley en Mestalla y ganó un encuentro en el que fue, al menos durante 60 minutos, superior a un Valencia que hizo aguas durante buena parte del partido y que sólo tuvo opciones de puntuar en el tramo final del encuentro, cuando mostró una cierta reacción.

Sólo en los instantes finales, cuando el Valladolid se quedó con un hombre menos, el Valencia tuvo opciones de empatar, gracias a la mejoría de su fútbol, aunque no tanto como consecuencia de la claridad de sus ocasiones. El Valencia ratificó que se encuentra en el peor momento de la temporada, que echa mucho en falta los goles del ayer sancionado David Villa y el Valladolid encontró oxígeno.

El Valladolid se adueñó del partido desde el minuto inicial por convencimiento e intensidad ante un equipo plano y sin recursos como el Valencia de los últimos tiempos. Gracias a ello, una magnífica jugada por la banda de Víctor y Marcos propició el 0-1, logrado por Sesma.

A partir de entonces, el Valencia fue un flan y el Valladolid se asentó y cogió moral tanto a base de aproximaciones constantes y peligrosas a la meta de César como del manejo del balón a su antojo en el centro del campo.

El Valencia era un querer y no poder, un equipo sin argumentos futbolísticos, lo que se tradujo no sólo el falta de llegada a la meta de Justo Villar, sino en alguna acción de infortunio como la que provocó el 0-2, logrado por Albiol en propia meta cuando apenas se rebasaba la media hora de juego.

Sólo en los minutos finales del primer periodo se nivelaron algo las fuerzas, ya que el equipo local se volcó sobre la meta de su rival, con más empuje que orden, mientras que el Valladolid mantuvo la compostura y no se vio obligado a cambiar un ápice su fútbol para llegar al descanso con una ventaja cómoda de 0-2. Los cambios variaron ligeramente la fisonomía del Valencia que empezó a ser más incisivo, pero la tarea era difícil por la desventaja y por la seguridad que demostraba el conjunto visitante.

ESPERANZA Fruto de esa mejoría llegó el 1-2, logrado por Marchena al cabecear un córner, lo que hizo creer al Valencia en la posibilidad de empatar y obligó al Valladolid a cambiar su dinámica para tratar exclusivamente de romper el partido y mantener la ventaja.

La lesión de Bea, que regresó al campo con la cabeza vendada, y la expulsión de Pedro López por una entrada a Morientes, dieron una intensidad especial al tramo final del encuentro, con el Valencia volcada sobre la meta del conjunto castellano, sin éxito.