Cuando en diciembre el Valencia quedó emparejado con el Atalanta para los octavos tuvo que contener la euforia pero, a pocas horas de visitar al equipo italiano (21.00 horas), todo ha cambiado. Regresar vivo a Mestalla sería magnífico. El equipo de Gian Piero Gasperini se ha confirmado como un huracán ofensivo. En una liga tan ‘amarrategui’ como la Serie A lleva 63 goles, 17 más que la afamada Juve de Cristiano. Nadie ha marcado más. El veterano Josip Ilicic es su gran referencia con el Papu Gómez moviendo los hilos detrás.

El huracán Atalanta se encontrará con una defensa cogida con pinzas. Las bajas de Garay y Paulista obliga a alinear a los franceses Diakhaby y Mangala, una pareja impensable hace unas semanas y que Celades solo probó contra el Logroñés.

Tras conquistar Stamford Bridge, el Nuevo San Mamés o el Johan Cruyff Stadium de Amsterdam, el Valencia cayó en picado lejos de Mestalla. La cuesta abajo incluye tropiezos tan graves como la goleada de Mallorca, la eliminación copera en Granada o el barrido del Getafe.

El Atalanta que pasó de la Serie B a la Champions en diez años eligió jugar en San Siro. El estadio milanés, a 60 kilómetros de bergamo, triplica sus 25.000 asientos. Con 50.000 voces confían en avivar el huracán y dejar la eliminatoria encarrilada.