El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) todavía no ha fijado una fecha para deliberar sobre la petición efectuada por Alejandro Valverde, ganador ayer de la Vuelta, para que anule la sanción del Comité Olímpico Nacional Italiano (CONI) que le prohíbe competir durante dos años en territorio de Italia. Este castigo le impidió correr en julio el Tour, ya que la prueba francesa recorría el valle de Aosta. El CONI, al contrario de las autoridades deportivas, judiciales y policiales españoles, lo han vinculado a la operación Puerto, lo que su equipo, el Caisse d´Epargne, considera una aberración.

El conjunto que dirige Eusebio Unzué espera que el TAS se pueda reunir antes de diciembre y dicte una sentencia favorable para el ciclista murciano. En cualquier caso, y en el supuesto de que el TAS diera la razón al CONI, este tribunal, con sede en Lausana, no tiene ninguna capacidad judicial para ampliar la sanción del ciclista más allá de las fronteras italianas.

El Caisse d´Espargne siempre ha considerado como una intromisión la decisión del CONI de suspenderlo y ha defendido la inocencia del ciclista y su legalidad a la hora de correr. "En la Vuelta, con el control que pasó en la etapa final, han sido 18 las veces en las que Valverde ha sido analizado", argumentó ayer Unzué, en Madrid.

PALMARES IMPRESIONANTE El ciclista murciano, con su victoria de ayer en Madrid, reúne uno de los palmarés más importantes entre los corredores profesionales en activo. Esta temporada, al margen de la Vuelta, se ha impuesto en el Dauphiné Libéré, que ya ganó en el 2008, la Volta, la Vuelta a Burgos, la Clásica de Primavera y en dos etapas de la Vuelta a Castilla-León. Se ha anotado también tres etapas del Tour, una de ellas por la descalificación de Ricardo Riccò por dopaje. En el 2006 y 2008 terminó la temporada como número uno mundial y también ha inscrito su nombre, entre otras pruebas, como vencedor dos veces de la Lieja-Bastogne-Lieja, la Flecha Valona y la Clásica de San Sebastián. Ha sido en dos ocasiones subcampeón del mundo (2003 y 2005) y tercero en el 2006.

Valverde, como el resto del pelotón de la Vuelta, superó la última etapa de la prueba, animada por el recorrido urbano por Madrid, como un puro trámite. El ciclista alemán André Greipel emuló a su compañero del Columbia Mark Cavendish (seis triunfos de etapa en el Tour de este año) al conseguir en Madrid la cuarta victoria al esprint en la ronda española. Esta hazaña lo recompensó con el jersey verde de la regularidad.

Los rivales de Valverde se rindieron al ganador. "Al final ha ganado el mejor, porque en una gran vuelta prima la regularidad y el que menos falla es el que se lleva el gato al agua. Valverde es el que menos ha fallado", manifestó el segundo, el asturiano Samuel Sánchez. Al respecto de su actuación señaló que no ha conseguido la victoria, simplemente, el ciclista murciano ha sido "mejor" que él y ha sabido aprovechar sus "fallos".