El australiano Mathew Hayman (Orica), de 37 años, dio la gran sorpresa al imponerse en la 114 edición de la París-Roubaix, disputada a través de 257 kilómetros y con 27 tramos adoquinados, en un duelo final en el que desplazó al belga Tom Boonen (Etixx), al que privó del quinto título del "Infierno del norte".

Hayman fue el más fuerte del quinteto de corredores supervivientes de la escapada que marcó la "reina de las clásicas" y en un final no apto para cardíacos levantó los brazos en el velódromo de Roubaix por delante de Boonen y del británico Ian Stannard (Sky). No se lo creía el veterano corredor aussie , quien no había ganado una carrera desde 2011. Cruzó la meta, incrédulo, con un tiempo de 5 horas, 51 minutos y 53 segundos. Fue un final emocionante, imprevisible, pues los tres citados del podio se jugaron la victoria con el belga Sep Vanmarcke (Lotto Jumbo) y el noruego Edvald Boasson Hagen (Dimension).

Pareció por unos instantes que el veterano Boonen lograría pasar a la historia con su quinto título. "El Tornado" arrancó a 2 de meta y abrió hueco, pero se le pegó Hayman, y ya en el velódromo los otros tres de la fuga.