«Después de cuatro años doy por finalizada mi etapa en el Diocesano». Así iniciaba Víctor Colo su mensaje de despedida del conjunto colegial, que abandona no para recalar en otro equipo, sino por motivos laborales. «Solo puedo tener palabras de agradecimiento hacia el club, mis compañeros y los dos entrenadores que he tenido [Miguel Ángel Ávila y Rai], pues no creo que vuelva a disfrutar tanto jugando al fútbol como lo he hecho durante estos años», añadía.