La trigésimoprimera jornada del Grupo IV de Segunda División B ha dejado dos victorias y dos empates para los equipos extremeños. Han ganado el Extremadura (1-0 al Melilla) y el Badajoz (1-0 al Granada B), mientras que han igualado el Villanovense, 0-0 en el campo del Recreativo de Huelva, y el Mérida, que empató con el Écija el sábado.

EXTREMADURA-MELILLA (1-0) / Un centro medido de Jairo y un remate en posición inverosímil de Kike Márquez sirvió para que el Extremadura recuperara la sonrisa y la confianza perdidas en las últimas semanas. La victoria exigua ante el Melilla permite al cuadro azulgrana dormir esta semana en cuarta plaza y con un colchó de cuatro puntos sobre el quinto, precisamente un Melilla al que le tiene ganado el average particular. Los de Martín Vázquez se jugaban más que puntos. Y cumplieron con nota a base de buen fútbol y, lo más importante, la victoria.

BADAJOZ-GRANADA B (1-0) / Decidió el jugador más desequilibrante sobre el terreno de juego, Guzmán Casaseca, con un gol tempranero a los seis minutos que otorga tres puntos importantísimos al Badajoz de cara a lograr la permanencia, tras superar por la mínima al Granada B.

Es cierto que ha sido uno de los partidos menos brillantes a nivel ofensivo pero también que los jugadores de Juan Marrero han hecho un gran esfuerzo físico ante un rival de mucha calidad que juega el balón desde atrás. Los pacenses lo han acusado en la segunda parte al ser dominados por el filial granadino, aunque ha sido un dominio ficticio, ya que los visitantes no han disparado ni una vez entre los tres palos.

RECREATIVO-VILLANOVENSE (0-0) / Empate a nada del Villanovense en su visita al Recreativo de Huelva, en un partido marcado por las escasísimas ocasiones que ambos conjuntos dispusieron para intentar llevarse el partido disputado en el Nuevo Colombino. Y es que pese a que los de Iván Ania no tiraron entre los tres palos en los 90 minutos, controlaron el partido, dispusieron de ocasiones y maniataron a un Recre que avisó en el segundo minuto de encuentro con un centro-chut desde la línea de fondo de Boris Garrós que sacó bajo el larguero Leandro para evitar el gol onubense.