El Villanovense espera con ilusión al Vecindario (21.00 horas) en uno de los mejores momentos psicológicos del equipo tras la goleada endosada hace apenas 3 días a la Gimnástica Torrelavega. Es el mismo espíritu que les ha llevado a abandonar el farolillo rojo y con el que afrontarán este segundo partido consecutivo en casa, y así se lo ha pedido el técnico Jaime Molina que volverá a ver el encuentro desde las gradas, con el que cumplirá su sanción de dos fuera del banquillo.

Los verdiblancos volverán a poner toda la carne en el asador para lograr el sueño de la salvación que ahora se encuentra a tan sólo 4 puntos (puesto de promoción) y que ya ven en el horizonte.

En una semana difícil en la que disputarán 3 partidos en siete días, el técnico verdiblanco no ha dado descanso a sus jugadores que han entrenado todos los días para preparar este nuevo encuentro. Tal y como afirma Molina, con tan poco tiempo entre la última jornada y la que se disputará hoy, ya adelantaron trabajo la pasada semana en la que además de tener dos días de descanso visionando videos del Vecindario.

Será hasta última hora duda Juan Carlos que pidió el cambio en el partido ante la Gimnástica, que se une a las ya consabidas de Víctor Marcos y Mora que aún se recuperan de su lesión. Frente a ellos tendrán a un equipo que se sitúa en la parte media de la clasificación (son undécimos) con 45 puntos, 14 más que los de Molina y que llegan de perder ante el Conquense.