Ceuta: Pau Torres; Arnau, Hornillo, Germán, Andrés; Samu, De Dios, Aitor (Añete, 55I); Guzmán, Toledo (Fernando, 71I), Diego Segura. B: Relaño, Pereira y Blanco.

CF. Villanovense: Javi Muñoz, Trinidad, Javi Sánchez, Cabrera, Lolo Guerrero; Nico Chietino; Anxo (Oscar, 71I), Raúl (Juanjo, 80I), Borja, Moraga; Willy (Sergio Narváez, 91I). B: Vílches y Tomillo

Gol: 0-1 (84I): Oscar.

Arbitro: Munuera Montero (Comitéandaluz). Mostró tarjetas amarillas a Hornillo, Aitor y Germán por los locales; y a Nico, Raúl, Lolo, Javi Muñoz, Borja, Trinidad (2 amarillas, expulsado en el minuto 93).

Incidencias: Estadio Alfonso Murube. Alrededor de unos 1.200 en las gradas. Terreno de juego en buen estado.

Con la ley del mínimo esfuerzo sacó ayer petróleo el Villanovense en tierras ceutíes. Bastó el gol del Oscar en las postrimerías para derrotar al equipo de la Ciudad Autónoma. Antes, en la primera parte, el partido había estado nivelado, pero el segundo acto fue un monólogo local que erigió a Javi Muñoz como actor estelar. El meta incluso detuvo un penalti a Germán en el último minuto del descuento para salvar los muebles de los suyos.

En la primera mitad el Ceuta, con el mismo once de las dos primeras jornadas salvo Pau Torres por Relaño, se encontró con un Villanovense bien plantado sobre el terreno de juego, que ejercía una gran presión en la zona medular impidiendo que los caballas desplegaran su habitual juego de toque.

Así las cosas, la primera mitad transcurrió muy nivelada y con pocas ocasiones de gol. Los primeros en acercarse con peligro sobre la portería rival fue el cuadro serón en torno al minuto 10 de partido. El ceutí Borja (curiosamente el Villanovense alineaba a dos norteafricanos como Cabrera y Borja, por ninguno de los locales) ejecutaba una falta lateral para que Raúl enganchara un disparo desde la frontal que no encontró portería por muy poco.

Tal y como hiciera el pasado miércoles en Copa del Rey ante el Melilla, el Villanovense de Adolfo estaba poniendo en apuros a un grande de la categoría como el Ceuta. Los de Sergio Lobera, por su parte, estaban agazapados y apenas creaban oportunidades. La única ocasión de claro peligro de los de la Ciudad Autónoma llegó en un desajuste defensivo de los de Adolfo Muñoz. Toledo se aprovechó de un despiste defensivo para agarrar el balón, penetrar en el área y disponer de un mano a mano que Cabrera despejó in extremis bajo palos.

Ambos contendientes parecían respetarse mutuamente y no volvieron a meter una marcha más a su juego hasta los minutos finales. En el 44 el Villanovense veía cómo Munuera Montero le amulaba un gol a Cabrera por presunto fuera de juego.

El epílogo del primer tiempo lo escribió el Ceuta con una acción en el último suspiro que a punto estuvo de acabar en el 1-0. El lateral Chapi Arnau engancha un centro-chut que se envenena en su parábola para que Javi Muñoz despeje con apuros.

SEGUNDA MITAD Tras el paso por vestuarios la decoración del encuentro cambió por completo y el choque pasó a ser un monólogo del Ceuta, que encerró al Villanovense en su propio campo ejerciendo una fuerte presión sobre la salida de balón local. A pesar de todo, el cuadro extremeño no le perdió nunca la cara al partido. Se mostró conservador, pero a la par serio y trabajador y casi no permitió ocasiones claras de gol.

Todo el bagaje ofensivo del Ceuta, poco pero de calidad, fueron dos disparos a la madera; uno de Toledo mediado el segundo acto, y el otro de Andrés poco después, que se sacó un zurdazo de la chistera para estrellar el balón en la misma cruceta haciendo temblar la portería.

El equipo de Adolfo Muñoz llegó muy poco a la portería de Pau Torres tras el paso por vestuarios. Solamente creo peligro en el minuto 74 producto de un error de Pau Torres a la hora de bloquear una falta lateral, pero ningún jugador del Villanovense anduvo espabilado para recoger el rechace y remacharlo al fondo de las mallas.

Sin embargo, le sonrió la fortuna al cuadro extremeño a falta de cinco minutos para la conclusión en el único remate que el Villanovense logró colocar entre los tres palos tras el descanso. Oscar se internó por el costado izquierdo y con un buen recorte dejó sentado a su defensor. Después con un sutil remate cruzado batió a Pau Torres para hacer el 0-1.

Pero nada más lejos de la realidad, ya que el Ceuta, merecidamente, iba a tener la oportunidad de hacer justicia en el último minuto a lo que se había visto sobre. Sobre la bocina Trinidad derribó a Arnau dentro del área y el colegiado Munuera Montero no dudó en señalar penalti. Germán cogió la responsabilidad, pero Javi Muñoz quiso erigirse en protagonista y le adivinó la intención al jugador ceutí para detener.