Como el resto de equipos del subgrupo, el Villanovense tiene este fin de semana jornada de parón en la competición antes de los tres últimos partidos de esta fase del campeonato.

El conjunto de Javier Álvarez de los Mozos llevó a cabo el lunes una sesión de recuperación tras su compromiso liguero disputado en Almendralejo. Con posterioridad, el técnico burgalés ha dirigido tres entrenamientos ya de manera más intensa el martes, el miércoles y el jueves, antes de dar descanso a la plantilla este viernes.

El conjunto serón afronta ahora el parón de la competición para cargas pilas con vistas a las tres finales que se avecinan. La primera será el domingo 7 de marzo con horario que ya se ha confirmado. La disputa del derbi Atlético-Real Madrid el domingo a las 16.15 obliga a modificar el horario habitual del Villanovense, desplazando en este caso la hora de inicio del choque a las 19.00 horas. El domingo 14, los serones viajarán a Villarrobledo para medirse al colista y en la última jornada recibirán al Talavera el 21 de marzo.

Sin duda alguna, el parón viene fenomenal al club presidido por José María Tapia. En lo mental toca reponerse tras la derrota en Almendralejo y en lo físico van a ser días cruciales para la recuperación de hombres tocados, sobre todo de la delantera. Anda renqueante Ruano y también sufren lesiones Miguel Díaz, Fran Viñuela y el propio Cristo. Son muchas bajas que el técnico burgalés ha venido supliendo con la incorporación de los chicos llegados en el mercado de invierno y con el renacer de Wilson Cuero. Y es que el colombiano resultó letal contra el Don Benito y su inspiración en el último pase llega en el momento más decisivo de la temporada para el Villanovense.