La buena salud del proyecto del Villarreal como club la expresa no solo el primer equipo, sino lo que llega por detrás: con una fuerte inversión en el programa de cantera desde hace varios años, el filial está luciendo en Segunda y el tercer conjunto, plagado de chicos jóvenes llegados de otras latitudes, ha finalizado cuarto en un grupo competitivo en teoría como el valenciano y a solo cuatro puntos del campeón, el Gandía (65 a 69).

Lo dirige el exportero internacional José Francisco Molina, cuya propuesta ha sido ofensiva, siguiendo los mismos criterios tácticos del submarino amarillo . Lo curioso es que estuvo a punto de ser cesado mediada la temporada, pero su excelente segunda vuelta le salvó. En sus filas hay jugadores que ya han debutado en Segunda División, como el defensa Cristian Galas o el delantero Fofo. También el Jerez tendrá difícil para perforar la portería del internacional juvenil Diego Mariño.