VILLARREAL: Diego López, Mario, Musacchio, Zapata (Hernán Pérez, m.63), Catalá (Senna, m.80); Bruno, Borja Valero, Cani, De Guzmán (Gerard Bordas, m.76), Camuñas y Rossi.

ZARAGOZA: Roberto, Juárez, Lanzaro, Da Silva, Paredes (Zuculini, m.73), Meira, Ponzio, Barrera, Luís García (Juan Carlos, m.65), Lafita (Ruben Micael, m.57) y Helder Postiga.

GOLES: 0-1, m.35: Luís García. 1-1, m.41: Rossi, de penalti. 1-2, m.45: Barrera. 2-2, m.81: Hernán Pérez.

ARBITRO: Del Cerro Grande (Comité madrileño). Expulsó a Lanzaro (m.80), por doble tarjeta amarilla.

El Villarreal y el Zaragoza firmaron un empate en El Madrigal a un gol, que mantiene a ambos equipos en la zona media baja de la clasificación. El tanto de Hernán Pérez salvó un punto en el minuto 81 para los locales, lo cual da algo de margen.

Los castellonenses pagaron su falta de acierto y pegada en el área y su endeblez defensiva, lo que permitió al Zaragoza estar a un paso de llevarse el partido, ya que el conjunto de Javier Aguirre estuvo dos veces por delante en el marcador y vio cómo, a falta de ocho minutos, les empataba el paraguayo Hernán Pérez.

Los locales vieron desde el inicio que el partido no sería ni mucho menos plácido, para sus intereses. Los castellonenses se encontraron a un Zaragoza, muy serio, agresivo y con la lección bien aprendida. Así, el equipo de Garrido sigue en crisis, ya que no es capaz de sacar adelante los resultados, ni siquiera ante rivales teóricamente inferiores.

Mientras tanto, el Zaragoza continúa con su particular lucha por salir de la zona peligrosa de la clasificación, donde se ha situado desde el inicio.