El técnico del Villarreal Manuel Pellegrini podrá contar finalmente con todos los jugadores que arrastraban distintas molestias físicas para poder afrontar el partido más importante en la historia del club ante el Arsenal, que le puede abrir las puertas de la final de la Liga de Campeones.

El conjunto español tiene que remontar el 1-0 adverso de la ida en Londres en un Madrigal abarrotado que sueña con ver a su equipo en la final de París.

Si tras el partido de la ida se le acumulaban los problemas al técnico chileno por la sanción de Alessio Tachinardi y las lesiones de Quique Alvarez y José Mari Romero, que se agregaban a las de Gonzalo Rodríguez y Juanma Peña, finalmente Pellegrini ha recuperado a todos los jugadores, a excepción de Gonzalo, que estará tres meses de baja.

EL GRAN SUEÑO El Villarreal confiará todas sus expectativas a sus dos jugadores más relevantes, el argentino Juan Román Riquelme y el uruguayo Diego Forlán, que deben ser los estiletes para tratar de romper la mejor defensa del campeonato.

Riquelme se ha recuperado de las ligeras molestias musculares que sufría y será el encargado de comandar el juego del Villarreal, mientras que Forlán será uno de los responsables de acabar con la imbatibilidad del meta Jen Lehmann en Europa, en el duelo que protagonizará con Thierry Henry, con quien compartió la pasada campaña la Bota de Oro.

El Arsenal de Cesc y Reyes acude determinado a solventar con éxito su segundo encuentro ante el Villarreal y asegurarse así su billete a la Final europea.

El internacional Sol Campbell, recuperado de su fractura de nariz, ocupará el lugar del lesionado Philippe Senderos. Otra baja para la formación de Wenger la constituye Ashley Cole, también en la línea defensiva.

Henry volverá al ataque en el equipo inicial del Arsenal, tras haber comenzado en el banquillo en el partido con el Tottenham, al igual que Cesc Fábregas. También regresarán el sueco Freddie Ljungberg y el bielorruso Alexander Hleb, al igual que José Antonio Reyes, tras cumplir su sanción en la ida.