MANCHESTER UNITED: Van der Sar, Brown (Neville, m.73), Ferdinand, Silvestre, O´Shea, Fletcher (Ji-Sung Park, m.52), Smith (Saha, m.81), Scholes, Cristiano Ronaldo, Rooney y Van Nistelrooy.

VILLARREAL: Barbosa, Javi Venta, Gonzalo Rodríguez, Peña, Arruabarrena, Roger (Héctor Font, m.65), Tacchinardi, Marcos Senna (Josico, m.77), Juan Pablo Sorín, Jose Mari y Figueroa (Xisxo, m.86).

ARBITRO: Massimo de Santis (ITA). Mostró cartulina amarilla a los locales Silvestre, Van Nistelrooy y Scholes y a los visitantes Senna, Josico y Tacchinardi.

El Villarreal, tras empatar 0-0 ante el Manchester United en Old Trafford, mantiene intactas sus esperanzas de clasificarse como campeón del grupo D para los octavos de final de la Liga de Campeones, y le bastaría un empate en casa ante el Lille en la última jornada para ver cumplido este sueño.

El conjunto que dirige Manuel Pellegrini, aunque careció de profundidad ofensiva, protagonizó un partido perfecto, sobre todo en la parcela defensiva, lo que le ha permitido mantenerse invicto en la máxima competición.

El Manchester se jugaba gran parte de su futuro europeo y pronto comenzó a avasallar a un Villarreal, que jugaba mermado por las ausencias de dos de sus principales jugadores, el argentino Juan Román Riquelme y el uruguayo Diego Forlán.

El equipo de Alex Ferguson anuló la creatividad visitante y Van Nistelrooy y sobre todo, Rooney eran sus principales estiletes. Un cuarto de hora tardó el Villarreal en entrar en el choque, conforme se deshizo de la presión del Manchester, que jugaba a un alto nivel, y Roger trataba de poner orden en el equipo español. El partido se equilibró cuando el Villarreal se acopló mejor en el campo, aunque la posesión seguía en poder de los locales y eran los diablos rojos los que generaban mayor sensación de peligro, muchas veces propiciada por las pérdidas de balón de los hombres de Manuel Pellegrini.