Papá Rins recordaba que Emilio Alzamora le había recordado al inicio del Mundial que se podían hacer dos ceros. "Pero no más". Tal vez porque Marc Márquez, el ejemplo a seguir, ganó sus dos títulos, tanto el de 125cc (2010, ceros en Jerez y Aragón) como el de Moto2 (2012, ceros en Francia y Malasia), con esos baremos. Alex, que tenía medio segundito guardado, se cayó a media carrera y dijo adiós a la victoria mientras perseguía a Maverick Viñales ("dejé que tomase el mando para observarlo", señaló el barcelonés).

No hubo más. O sí, un tremendo accidente del francés Alan Techer, que hizo que dirección de carrera, muy sensibilizada tras el fallecimiento de Marco Simoncelli en el 2011, suspendiese la carrera igual que en Austin hace 15 días. Pero, contrariamente a lo ocurrido en EEUU, donde se corrió una especie de superpole , a tan solo cinco vueltas, en Jerez se dio por concluida la carrera, pues se habían completado ya 15 giros. Suficientes.

Y como en la vuelta 15 el líder era Viñales, con Luis Salom pegadito a su colín, la carrera acabó con la primera victoria del año del gran favorito de este Mundial. "Me sabe mal no haber podido celebrar el triunfo con una vuelta de honor como es menester y placer en Jerez, pero... he tenido más premio del esperado", señaló Viñales, líder del Mundial.