"Estoy caliente. Hablemos del próximo partido". Gustavo Aranzana se dio cuenta de que llevaba cinco minutos de dura queja contra quienes, afirmó, emiten "comentarios que lo que buscan es hacer mal. Están diciendo muchas estupideces, soltando mierda y poniendo el ventilador para que se oiga". El entrenador del Cáceres 2016, en una comparecencia ante los medios en la que se habló mayoritariamente de la amplia derrota en Melilla, dedicó la parte final a quejarse, sin dar nombres, de los críticos a su labor y argumentan que tiene uno de los mayores presupuestos de la LEB Oro.
Al técnico pucelano le fastidia "enormemente" la etiqueta de "millonario" que algunos han puesto al Cáceres y que se "torpedee" al club. El último ejemplo parece ser el Melilla. En este caso concreto, Aranzana respondió con un sarcasmo: "Claro. Entiendo que, con el presupuesto que tienen ellos, con no bajar, vale", indicó.
"Prefiero estar en un club serio que paga todos los meses a estar en otros que fichan y deben tres meses. Lo que tiene que saber la ciudad y la afición es que la gestión de este club es perfecta. Funciona como un reloj, con lo que tenemos, que es poquito, digan lo que digan", dijo, en un tono que se encendía.
"A la cara"
"¿Que estamos haciendo lo que tenemos que hacer? Pues vale. ¿Estamos haciendo un equipo para subir a la ACB? Pues vale", añadió irónicamente. "Cada uno sabemos dónde decimos las cosas y delante de quién. Tonto no soy. El que quiera hablar, que lo haga aquí, a la cara. Abrazos por detrás no necesito. Yo no he hablado mal de nadie. Respeto a todo el mundo. Que me respeten a mí. Y a mis jugadores, que están haciendo un trabajo excelente. Cuando pierdo, soy el mayor horror. Hay que aguantarme tras perder en Melilla", declaró.
Precisamente sobre el choque de Melilla tampoco ahorró palabras críticas contra sus jugadores. "Hay que intentar cambiar el chip. Ha sido un palo, porque puedes perder, pero no de esa forma. En los últimos 12 minutos de partido nos meten un parcial de 38-14. Hubo un cúmulo de despropósitos y se bajaron los brazos. Me rebelo contra ello y no voy a consentirlo", advirtió. En este caso sí ofreció nombres y apellidos: "Cherry está lesionado y no sabemos lo que tiene, puede ser un problema en un nervio; Xavier no ha aparecido en los últimos encuentros fuera; Humphrey se va del partido tras un técnica; McCoy empieza bien, pero no defiende tras pitarle dos faltas; la segunda unidad no juega igual de confiada que en casa...".
