Cuando el equipo Andalucía-Cajasur tome hoy la salida en la contrarreloj por equipos de Granada habrá empezado la que se presenta como mejor edición de la Vuelta de los últimos 25 años (20.00 horas, La 2). La ronda española --con el Angliru como plato fuerte-- contará con los dos últimos ganadores del Tour, Carlos Sastre y Alberto Contador, y un Alejandro Valverde en busca de su primera gran vuelta por etapas.

Sí, los grandes favoritos son españoles, pero no tanto por la espantá de corredores foráneos --faltan Menchov, vigente campeón, que ya ha corrido Giro y Tour, y Evans, mermado por un golpe en la rodilla-- sino por el gran año del ciclismo español, que aspira a un póquer histórico.

"El Tour de este año será la Vuelta a España", ha dicho Víctor Cordero, director general de la Vuelta. Un dato le avala: en el pelotón que tomó la salida de la ronda gala en Brest solo Oscar Pereiro contaba con un Tour en su palmarés. Hoy, en cambio, habrá dos en la rampa de salida, Contador y Sastre, y habrían sido tres de no ser por la escalofriante caída del gallego en el Agnello.

TRES MAILLOTS EN 14 MESES. Contador parte, por unanimidad, como el principal candidato al jersey oro. A diferencia de sus rivales, el madrileño no ha disputado el Tour, injustamente vetado por la organización de la carrera francesa, que ahora lo es también de la española. Si ganó el Giro ante lo más granado del pelotón italiano sin haberlo preparado, en la Vuelta puede salirse.

En caso de lograrlo, el ciclista de Pinto sería el quinto de la historia, tras Anquetil, Gimondi, Merckx e Hinault, en inscribir su nombre en las tres grandes. "Quiero ver cómo voy y hasta dónde llego. Me gustaría ganar esta carrera antes de retirarme, pero solo tengo 25 años, me quedan muchos por delante", dice Contador, que ayer aseguró que quiere disputar la contrarreloj del Mundial.

También vistiendo la casaca del Astana estarán Levi Leipheimer y Andreas Klöden --los extranjeros con más opciones junto a Cunego y el joven escalador Gesink--, capaces de luchar por la victoria y que darán mucho juego a Johan Bruyneel. "Vengo con los deberes hechos --argumenta Contador--. En principio la baza a jugar es la mía, pero hay otros dos corredores que nos darán mucha tranquilidad".

COMO EN 1983. Sastre debe ser el principal rival de los kazajos. Desde que se disputa en septiembre, la Vuelta no había contado nunca con el vigente campeón del Tour. Sastre, que guarda una relación especial con esta carrera, se ha saltado la norma, como hizo Bernard Hinault en 1983, cuando, precisamente en Avila, destrozó a Julián Gorospe y le arrebató el liderato a costa de perderse el Tour de ese año.

Sastre no ha tenido descanso este verano. Sin apenas tiempo para celebrar el Tour, prestó una ayuda de oro a Samuel Sánchez en Pekín y al regresar siguió entrenando para preparar una carrera que siempre está en sus planes. "Contador ha preparado la Vuelta y lo tendrá más fácil que los demás. Pero llego con ilusión, con la misma que tenía antes del Tour, con la intención de luchar por algo importante", explica.

El tercero en discordia es Alejandro Valverde, líder de un Caisse d´Epargne al que se le resiste la Vuelta desde 1998, con Abraham Olano. El murciano, pletórico en primavera, acabó noveno el Tour tras ganar la primera etapa y gozar del liderato. A Granada dice llegar algo corto de preparación, por lo que cree que "la Vuelta será un duelo entre Contador y Sastre". Pero nadie duda que si se ve en la lucha puede optar a la victoria. "El primer día de montaña se verá si puedo disputar o no".

Hoy arranca en definitiva una carrera con un recorrido muy atractivo y que promete un espectáculo interesante.