Primer contratiempo para el Cáceres, que esperó ayer en vano a su alero estrella, Derell Washington. El jugador llamó al club desde el aeropuerto de Mobile, en el estado de Alabama (EEUU), para decir que su vuelo se retrasaba 24 horas por cuestiones relativas al apagón que ha sufrido parte del país hace unos días. Los responsables verdinegros han dado por buena la explicación y el norteamericano no será sancionado, aunque se le aguarda hoy.

Incluso el Cáceres manejaba la posibilidad de que tanto Washington como el último fichaje, su compatriota Bryan Sallier, se desplazasen en el mismo vuelo y llegasen juntos a Cáceres para incorporarse a los entrenamientos del equipo.

ABONOS Y CANTERA

Paralelamente, la entidad continúa con su labor de reconstrucción en distintos aspectos. De momento, hay satisfacción con el transcurso de la campaña de abonados y ayer se alcanzaba prácticamente la cifra de los 750. Pese a ello, la comparación con otros exclubs de ACB como Zaragoza (que lleva 5.800), León (2.500) y Granada (2.000) deja a los verdinegros aún lejos de las cotas que se habían proyectado. Otros como Gijón, con 300, están por debajo.

Otra cuestión es la cantera. Actualmente se elabora un plan para relanzarla, aunque aún se desconocen los detalles. Sí puede adelantarse que Sergio Ibáñez, que ha trabajado para el Unicaja, será su coordinador. Mientras, el primer equipo también tiene previsto recurrir ocasionalmente a jugadores juniors vinculados a la Fundación Cáceres. De hecho, ahora están entrenando con la plantilla de Ñete Bohigas dos de ellos, el base Carlos Vaquero y el alero Javi Martín.