Dos muertos muy rentables, Diana de Gales y John John Kennedy, el hijo del presidente estadounidense, habrían vivido una noche de pasión en una suite de lujo en Nueva York a mediados de los años 90. Por si esto fuera poco, el envite amoroso entre el que fuera el soltero más deseable del planeta y la princesa más popular del mundo habría ocurrido en el Carlyle, el mismo hotel donde el legendario presidente se citaba clandestinamente con Marilyn Monroe. Desgraciadamente, de la supuesta aventura no hay más prueba que la palabra de una de las astrólogas de Diana, conocida como La Bruja Blanca de Hendon.

En un libro de inminente aparición, Diana: la última palabra, Simone Simmons, de profesión echadora de cartas y ahuyentadora de malos espíritus, asegura que la princesa de Gales le reveló tan goloso secreto así como quien no quiere la cosa. "Empezamos a hablar de esto y de aquello, y terminamos en la cama juntos. Fue pura química", asegura Simmons que le contó su ilustre clienta.

La princesa incluso puso nota --"un 10, el máximo"-- a las habilidades del joven Kennedy, al que calificó como "un amante excepcional". Tan encantada estaba Diana que, siempre según Simmons, empezó a fantasear con la idea de convertirse en la primera dama de EEUU y de vivir en la Casa Blanca.

Las fantásticas revelaciones, que está publicando por entregas un diario sensacionalista británico, fueron ayer negadas rotundamente por el que fuera el secretario privado de la princesa. Patrick Jephson explicó que, en 1995, Kennedy quería entrevistar a la princesa Diana para su nueva revista, Georges.

CON ´COPYRIGHT´ David Beckham puede afrontar una demanda del creador de 9 de los tatuajes que luce porque el futbolista quiere emplearlos en una campaña publicitaria, según publicó Daily Mirror . Louis Molloy, que, entre otros, diseñó el gran ángel protector que Beckham lleva en el cogote, dice que posee los derechos de autor de sus imágenes y que demandará al futbolista si se lucra con ellas.

CHAPUZON MILLONARIO Jaime de Marichalar fue uno de los invitados a la fiesta del 70º cumpleaños de Joao Flores, presidente de la Cámara Hispano Portuguesa en España, que se ha celebrado en Biarritz (Francia) este fin de semana. Además del duque de Lugo, que estuvo sin la infanta, asistieron personajes como Fernando Fernández Tapias y su mujer, Nuria González; Alberto Cortina y Marián Lapique; Miguel Boyer e Isabel Preysler; Isidoro Alvarez, presidente de El Corte Inglés; José María Amusátegui, expresidente del BSCH, y Carlos Goyanes, Cari Lapique y su enemiga pública: Eugenia Martínez de Irujo. Además de los empresarios, tampoco faltó la televisiva María Teresa Campos.