LA FERROVIARIA obtuvo en los nueve primeros meses un beneficio después de aportaciones del Estado de 58,6 millones de euros; un descenso del 25,4% respecto al mismo periodo del 2003, según la empresa. La caída se debe, sobre todo, al impacto del 11-M, el retraso del AVE y el aumento del coste de la energía.