El 85,8% de las pequeñas y medianas empresas ve su supervivencia en riesgo si la crisis del coronavirus se prolonga, según se desprende del segundo barómetro de opinión de realizado por la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme). No obstante, casi la totalidad de las empresas encuestadas (96%) ha asegurado que la crisis les está afectando ya. Por ello, la patronal remarca que las pymes necesitan nuevas medidas de manera urgente para paliar los efectos de la crisis que complementen a las ya adoptadas por el Gobierno.

De hecho, el 87% de las pequeñas y medianas empresas no valora las medidas que se han tomado hasta ahora o lo hace de forma negativa. Según Cepyme, los resultados de la encuesta instan a tomar nuevas medidas que ayuden a las pymes en la «drástica reducción de ingresos que están viviendo». El 60% de los encuestados afirma que ha sufrido una pérdida de ingresos de entre el 75% y el 100%, mientras que un 15% contabilizó unas pérdidas de entre un 50% o un 75%.

Para la patronal, esta caída de ingresos no se deriva tan solo del cierre obligatorio decretado por el Gobierno, sino que los mayores obstáculos se dan en la falta de demanda (49%) o la imposibilidad de llevar a cabo su actividad (44%). Por ello, las pequeñas y medianas empresas piden medidas que faciliten su situación y les proporcionen liquidez. Así, el 81% de las compañías encuestadas han pedido suspender obligaciones fiscales y de cotizaciones para ganar liquidez y realizar el pago más adelante.

El 75% apunta a ayudas directas y el 71% solicita la reducción de cotizaciones, mientras que un 61% pide reducir impuestos. Las empresas también reclaman otras medidas como poner en marcha un plan de pago a proveedores (49%), flexibilizar los ERTE (44%) o ayudas para los arrendamientos (37%). Cepyme cree que estas medidas ayudarán a que las pequeñas y medianas empresas aguanten más tiempo durante este parón de actividad y considera que las actuaciones que están tomando las empresas en esta situación «resultan preocupantes».

El barómetro señala que algunas compañías han optado por los impagos, ya sea a proveedores (20%) como a préstamos u obligaciones tributarias. Esto, según la patronal, «puede poner en riesgo el mantenimiento de la cadena de impagos, influyendo en la pérdida de ingresos a su vez de otras empresas». De hecho, más del 70% de las empresas encuestadas prevé sufrir un incremento de la morosidad.

Por otro lado, el 3,5% de las empresas ha realizado un cierre empresarial y un 2% ha declarado concurso por insolvencia. El 22% ha cesado su actividad de manera temporal y el 29% la ha reducido. Pese a ello, la patronal apunta que la mayor parte de las empresas han tomado medidas para poder seguir funcionando, adaptándose al teletrabajo, incrementando la protección de los trabajadores o reduciendo y modificando la distribución de jornadas.

Más del 50% de las empresas encuestadas ha señalado que ha realizado un ERTE, de los que la mitad ha sido por fuerza mayor,y el 13% de los consultados señala que ya ha realizado despidos o que prevé hacerlos.

Respecto al mantenimiento del empleo en el medio plazo, casi el 40% de las compañías prevé mantenerlo dentro de 12 meses. Respecto a una posible reducción de plantilla, las pymes dicen que podrían realizarla en un año y la mayoría cree que podría ser menor del 25%, mientras que el 15% dice que la reducción podría alcanzar al 75% o incluso al 100% de la plantilla.