Accionistas de Afinsa denunciaron hoy, ante el juzgado central de Instrucción 1 de la Audiencia Nacional, la posible venta irregular de sellos propiedad de la filatélica en Madrid, informó en un comunicado el bufete de abogados de Javier Gómez de Liaño, encargado de interponer la denuncia.

En la denuncia se hace constar que el pasado domingo 9 de septiembre, al menos dos comerciantes de la Plaza Mayor de la capital ofrecieron en venta, "a un importante coleccionista español", piezas de la colección de "Certificados de España", propiedad de Afinsa y que figuran en el inventario de su patrimonio.

Según la misma fuente, el coleccionista que recibió la oferta es "el máximo experto en este tipo de filatelia y fue quien formó esa importante colección, galardonada en todo el mundo, y que luego vendió a Afinsa".

Tras comprobar que se trataba de piezas de la citada colección, el experto puso los hechos en conocimiento de los propietarios de la compañía. El bufete de abogados apuntó que tanto los accionistas de Afinsa como sus antiguos administradores se sienten "consternados" por lo sucedido y rechazan "las circunstancias que lo han hecho posible".

Situación injusta

El comunicado añade que Afinsa "padece una situación injusta desde el pasado 9 de mayo de 2006", día en el que fue intervenida la filatélica, que desde entonces se encuentra suspendida de actividad y no puede cumplir con sus compromisos.

En verano, los administradores concursales decidieron trasladar los sellos de Afinsa y sus clientes a los almacenes que la compañía Logista tiene en Leganés (Madrid). En ese momento, añade la fuente, se comprobó "fehacientemente" la existencia de mas de 200 toneladas de material filatélico, que fue trasladado en 22.000 cajas que contenían 150 millones de sellos valiosos.

"Ahora y como consecuencia de una negligencia en la guarda y custodia de esos sellos, se agrava el daño causado a sus clientes con la desaparición de parte del valioso patrimonio de la compañía", aseguran los letrado encargados de la defensa de Afinsa.

Ante estos hechos, los accionistas de la filatélica exigen que se investiguen los hechos, así como el cese "inmediato" de aquellos que tenían la obligación de velar por la integridad del patrimonio de la empresa.