El gestor aeroportuario español Aena ha percibido un descenso en el tráfico desde que el Gobierno británico anunciase una cuarentena obligatoria para los viajeros procedentes de España como medida de prevención ante el aumento de rebrotes en el país.

Así lo han admitido desde la compañía en la presentación de resultados del primer semestre del año, periodo en el que el gestor ha perdido 170,7 millones por el impacto de la crisis del coronavirus, que ha provocado un descenso abrupto en el tráfico de pasajeros. Entre enero y junio, el tráfico de pasajeros en las instalaciones de Aena en España han caído un 66%, hasta los 43,5 millones. Los ingresos totales fueron de 1.12 millones, un 47% menos.

Desde la entidad han señalado que, aunque la situación del tráfico aéreo "cambia casi cada semana", sus expectativas para los meses de julio y agosto son "prometedoras". De hecho, en los últimos días de julio se ha recuperado el 50% del tráfico respecto a 2019, pero admite, no obstante, que esta tendencia ha cambiado tras la decisión de Reino Unido. En este sentido, desde Aena han reconocido que es "difícil" hacer una predicción exacta del impacto de esta medida aunque han asegurado que se podrá percibir en las próximas semanas.

A largo plazo, aunque se estima que será entre 2024 y 2027 cuando se recuperarán los niveles de tráfico de 2019, Maurici Lucena, presidente de Aena, ha manifestado que confía en que esta recuperación será antes del peor escenario planteado, que considera "extremadamente pesimista".

RETRASO DE LAS INVERSIONES

Ante este escenario, desde el gestor se admite que será necesario retrasar la expansión de los aeropuertos de Madrid y Barcelona, aunque han asegurado que las terminales necesitarán más espacio a medida que se recuperen los niveles anteriores a la crisis del coronavirus.

Este retraso ya lo había confirmado el mes pasado el presidente de Aena durante la cumbre empresarial de la CEOE, Y también lo hizo ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, quien aseguró que aunque el gestor mantiene, a pesar de la crisis y el desplome generado en el transporte, sus grandes planes de inversión en la ampliación de los dos mayores aeropuertos del país, el de Madrid Barajas y el de Barcelona El Prat, los efectos de la pandemia retrasarán su puesta en marcha "más allá" de la fecha de inicio prevista para 2022.