El efecto dominó de las protestas contra la subida del gasóleo siguió ayer con el anuncio de movilizaciones por parte de los agricultores. Después de las huelgas en el sector pesquero y el del transporte, una asociación de agricultores de Cataluña, Unió de Pagesos, anunció ayer que el sábado aprobará la convocatoria de un calendario de acciones de protesta a partir de la semana próxima y que irán subiendo de intensidad.

A juicio de esta asociación, el Gobierno tiene margen suficiente con los ingresos que recibe gracias a que el precio del gasóleo agrícola se ha duplicado desde el 2004 hasta los 0,96 euros. Unió de Pagesos reclama a la ministra Elena Espinosa que cumpla la promesa de crear el gasóleo profesional.

En el sector del transporte, la patronal Fenadismer, a la que se le ha adherido Confedetrans, se reafirmó en su convocatoria de un paro indefinido a partir del 8 de junio tras una reunión con el Ministerio de Fomento. El presidente de Fenadismer, Julio Villaescusa, reclamó que el Gobierno estipule una tabla de tarifas mínimas que eviten el dumping (cobrar por debajo de costes) y medidas para que el transportista pueda repercutir a sus clientes las subidas del carburante.

Sin embargo, la principal organización (CETM), que representa al 60% del sector, reafirmó el rechazo a la huelga y planteó medidas como la eliminación del céntimo sanitario que grava a los combustibles. El director general de Transporte por Carretera, Juan Manuel Sánchez, fijó un calendario de reuniones hasta el 12 de junio y rechazó las peticiones de Fenadismer.

En Gran Bretaña, cientos de camiones causaron el caos en el centro de Londres y se manifestaron hasta la residencia del primer ministro, Gordon Brown, donde entregaron una carta exigiendo que reduzca los impuestos en 34 céntimos por litro de gasóleo para evitar el bloqueo de refinerías la próxima semana.

MAS PUERTOS La huelga iniciada el lunes en varias cofradías de pescadores españolas se extendió ayer a dos puertos de Almería y Cádiz. Además, en los próximos días dejarán de faenar las flotas de otros puertos, hasta culminar en una huelga europea el próximo viernes.