Los ganaderos afectados por el brote de brucelosis en la comarca de Coria recibirán una ayuda de hasta 330 euros por animal enfermo, y de hasta 15.000 euros por explotación, según el decreto que aprobará hoy el Consejo de Gobierno de la Junta. Sin embargo, las nuevas ayudas no son suficientes para los ganaderos, que ayer se concentraron en Cáceres para exigir a la Junta un plan de choque contra esta enfermedad.

El consejero de Agricultura, José Luis Quintana, explicó ayer que los ganaderos con animales afectados de entre 18 y 30 meses podrán obtener hasta 270 euros (180 hasta hora), y hasta 330 euros por las reses de entre 30 y 60 meses (antes 240); así como una ayuda de 240 euros por animales de entre 5 y 8 años, subvención que no existía hasta hoy. Además, todas ellas tienen caracter retroactivo, por lo que la ayuda se contabilizará desde el mes de septiembre pasado, fecha en la que se declaró el brote, indicó Quintana.

El titular de Agricultura considera que "estas medidas suponen en la práctica duplicar las ayudas" que en la actualidad se conceden a los ganaderos, para paliar los efectos de un brote que ha provocado la inmovilización de un millar de explotaciones de 17 localidades de la comarca de Coria.

Asimismo, aseguró que la incidencia de la enfermedad en estas fincas se ha reducido del 27% en septiembre al 17% en enero.

Estas medidas, a juicio de los líderes agrarios de Coag, Luis Cortés, y de Asaja, Angel García Blanco, son insuficientes. Ayer acompañaron a un grupo de ganaderos afectados que se concentró en la Diputación Provincial de Cáceres para exigir a la Junta un plan de choque para erradicar la enfermedad.