El balance realizado por los organizadores de la XXI edición de la Feria Internacional del Suroeste Ibérico (Agroexpo) ha sido muy positivo. Así lo ha explicado el director del departamento comercial y marketing de Feval, Javier Alvarez, quien ha indicado que en estos cuatro días de feria "ha reinado el optimismo".

En cuanto a los expositores, en esta edición se ha cubierto el total de las instalaciones internas y externas, manteniéndose al mismo nivel que en años anteriores. Han participado más de 190 empresas expositoras, representando a más de 450 marcas y ocupando 32.000 metros cuadrados netos de superficie. Agroexpo ha mantenido el nivel expositivo de las pasadas ediciones, lo que ha representado un respaldo definitivo del sector al certamen y ha supuesto la fidelización de los expositores hacia la feria.

Alvarez ha añadido que aunque se han perdido algunos expositores de la comunidad autónoma, y otros que trabajaban con la agricultura tradicional, han ganado expositores de otras comunidades, de otros países y de otros sectores que apuestan más por la innovación, lo que se denomina últimamente como la agricultura del conocimiento .

Los expositores y visitantes que han acudido desde otras comunidades autónomas han sido sobre todo los que cuentan con tipos de cultivo similares al extremeño, es decir, los que manejan tomate, olivar y hortofruticulturas. Han venido empresas del Levante, Andalucía, Navarra y Aragón.

Por otra parte, aunque no se conoce el número total de visitantes, según ha explicado el director comercial, sí se puede hablar de una mayor afluencia respecto a otros años, "no sólo referido al número, sino también a calidad, porque han venido profesionales del sector agropecuario, personas cualificadas y con posibilidad de comprar. Se han hecho transacciones comerciales muy importantes durante la feria", ha añadido.

También las reuniones sectoriales, las jornadas técnicas y ponencias han cumplido su labor: informar y formar. Javier Alvarez destaca que "ha habido una asistencia más que razonable a cada una de ellas, algo que nos ha sorprendido por una parte, aunque por otra hay que decir que ha habido ponencias muy interesantes para el sector y han acudido excelentes ponentes".

El director comercial ha destacado la satisfacción de los expositores, ya que la feria se ha realizado en un momento muy beneficioso para los agricultores, "ya que han favorecido las lluvias de estas semanas, y el que los agricultores tengan garantizados como mínimo dos ciclos de cultivo con riego, porque eso hace que el agricultor se vea seguro e invierta y compre". Entre las ventas realizadas en estos cuatro días se encuentran dos cosechadoras de última tecnología de tomate de 300.000 euros cada una.

Lo más destacado de la feria para Javier Alvarez ha sido "el gran optimismo que ha habido. En otras ferias que visitamos por España, en otros sectores y en el día a día, la gente es en general pesimista. Sin embargo, aquí ha habido mucho optimismo tanto a nivel productivo como a nivel de adquisición de material. Ha habido muchas ganas de hacer negocio tanto por parte de los expositores como de los visitantes".

Pero una de las actividades que más éxito ha tenido es la realización de los encuentros comerciales, similares a los de FIAL. Estos encuentros comerciales, organizados junto a Fomento de Mercados, han estado dedicados al sector del tomate.