Es una mala noticia para la Comunidad de Madrid que la sede de una empresa eléctrica que es multinacional y que es una de las grandes empresas españolas multinacionales se traslade fuera del territorio nacional". Con esta sorprendente alusión a Cataluña se refirió ayer la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, a la OPA de Gas Natural sobre Endesa, en la que se incluye el plan de descentralizar el grupo resultante y ubicar en Barcelona su sede.

El PSOE juzgó "inadmisibles" las declaraciones de Aguirre que, hasta ahora, personifica el rechazo más rotundo del PP a la OPA. El secretario de Relaciones Institucionales del PSOE, Alfonso Perales, pidió a Aguirre que "corrija sus desafortunadas palabras y aparque, de una vez por todas, su lenguaje ultraderechista, porque no es bueno para Madrid, ni para Cataluña, ni para España".

Según Perales, "el PP, en lugar de contribuir a cohesionar España, se dedica a alentar odios y recelos entre los españoles". El secretario de organización del PSC, José Zaragoza, señaló que Aguirre alimenta "el separatismo y la división" de España con "su kale borroka madrileña".

RECTIFICACION POSTERIOR El alud de críticas llevó a la Comunidad de Madrid a emitir un comunicado de rectificación. La dirección general de Medios reconoció que las palabras de Aguirre se debían a un error: "La presidenta se refería al traslado de la empresa fuera del territorio regional y no nacional, como por error afirmó". Aguirre había realizado sus declaraciones en una rueda de prensa conjunta con el vicepresidente económico, Pedro Solbes, con quien se había reunido para hablar de financiación autonómica.