La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) ha revisado en dos décimas su previsión de déficit para este año, elevándolo hasta el 14% del PIB en el peor de los escenarios posibles, por la puesta en marcha del nuevo ingreso mínimo vital y un mayor gasto sanitario del previsto.

Si bien en el caso del ingreso mínimo la Airef no dispone de información necesaria para su evaluación, tal y como explicó ayer en el Congreso de los Diputados su presidenta, Cristina Herrero, el organismo ha incorporado las previsiones de gasto del Ejecutivo. Herrero explicó que, desde la revisión de previsiones, se han aprobado además la extensión modificación de los ERTE extraordinarios, con la aparición del ERTE parcial, y se ha producido una transferencia a la Seguridad Social, que en términos de impacto global no desvía las previsiones. La presidenta de la Airef censuró que no se recogiera en estas previsiones el impacto del ingreso mínimo pues, a su juicio, «tendría que haberse incorporado en la actualización». «En ese momento se podía desconocer la adopción de otro tipo de medidas, pero esta medida ya se había anunciado y se estaba trabajando en ella», aseveró.

Frente a una previsión de déficit del 14% del PIB para este año por parte de la Airef, el Gobierno proyecta un desfase del 10,34% para el conjunto de las administraciones públicas, con un nivel de deuda del 115,5% .

En un coloquio organizado por el Consejo de Economistas, la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, explicó ayer que aún hay gastos e inversiones «imprescindibles e inaplazables» derivados de la pandemina, por lo que será a «medio plazo», una vez que se recupere la senda de crecimiento sostenido, cuando se retome la senda de consolidación fiscal y de reducción del déficit público

Según Calviño, la economía ya da muestras de un «cambio de tendencia» tras el fin de la hibernación y el inicio de la desescalada, con «cierta recuperación» en la actividad y el empleo.