BERLIN. El jefe del Gobierno alemán presentará por su cuenta una reforma laboral y económica prescindiendo de los sindicatos y de la patronal. El canciller hizo ese anuncio tras dar por muerto el pacto por el empleo, firmado en 1989, para dinamizar la economía. Schröder afirmó que las posiciones entre las partes se han distanciado tanto que no tiene sentido buscar una posición común. El canciller destacó que el país no puede seguir esperando y por eso el Gobierno debe "formular lo que es necesario". G. C.