"Hoy no hay un problema con las pensiones. Sí que lo habrá si durante los próximos 20 o 25 años no se llevan a cabo ajustes, ya que a mediados de la década de los 20, se empezarán a sentir los efectos del envejecimiento de la población, porque estos se acelerarán". El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, salió al paso así del revuelo causado por el último informe de la Comisión Europea en el que advertía sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones en España. "Son proyecciones que se hacen hasta el 2060 y que advierten de lo que sucederá si no se hace nada de nada", agregó. En un encuentro con periodistas en Barcelona, recordó que España cuenta con mecanismos para revisar el sistema.
El comisario avisó, además, de que "la montaña de deuda" que han generado las medidas anticrisis aprobadas por los gobiernos "supondrá un esfuerzo que costará al menos una década absorber". Y admitió que, en el 2010, la Unión Europea (UE) deberá mantener los estímulos para el crecimiento.
