El grupo industrial francés Alstom anunció ayer que ha firmado varios contratos con el Ministerio de Ferrocarriles de China, por un valor superior a los 1.400 millones de euros, para suministrar trenes regionales y locomotoras en los próximos años.

Los multimillonarios contratos contribuirán a sanear las cuentas de la multinacional francesa, que hace sólo unos meses estaba al borde de la quiebra. La ofensiva comercial en China es una de las bases para la salvación del grupo, cuya deuda superaba los 3.000 millones de euros el 31 de marzo y que logró el visto bueno de la Comisión Europea. Este programa incluía que el 21,36% quedaría provisionalmente en manos del Estado francés, y comportaba una ampliación de capital.

Los contratos firmados ayer con China representan más del 10% del total de los encargos que logró Alstom el año pasado en todo el mundo.