Las aerolíneas American Airlines (AA), British Airways (BA) e Iberia quieren inmunidad antimonopolio para formar una operación conjunta que puede convertirse en un agente poderoso en el mercado de la aviación transatlántica, informa hoy el periódico británico "Financial Times" (FT). Estas aerolíneas esperan alcanzar este mes un acuerdo sobre cómo compartir los beneficios e ingresos, según los ejecutivos de estas empresas.

Según el FT, las mayores aerolíneas que vuelan a ambos lados del Atlántico han decidido llegar a nuevos acuerdos debido al alza de los precios del carburante, la debilidad de la economía y al impacto del acuerdo "cielos abiertos" entre la Unión Europea y EEUU.

El actual acuerdo bilateral entre American y British Airways excluye sus rutas transatlánticas, que pueden ser las de mayor beneficio en el nuevo negocio conjunto, indica el FT. Al incluir Iberia, American y British se beneficiarían de un vínculo importante entre el continente europeo y América Latina.

La compañía estadounidense y la británica esperan argumentar ante los reguladores de EEUU que la situación de la competencia ha cambiado por el acuerdo de "cielos abiertos", dice el periódico. Las dos compañías solicitaron inmunidad antimonopolio en 1997 y en 2001, pero los reguladores les exigían que vendieran un gran número de "slots" de despegue y aterrizaje en el aeropuerto londinense de Heathrow, medida muy difícil para las dos aerolíneas.

El periódico añade que BA y American esperan dejar claro que las recientes olas de fusiones y nuevas alianzas han reforzado a muchos de sus rivales transatlánticos.

Delta Air Lines y Northwest Airlines de EEUU, que han acordado una fusión, consiguieron a principios de este año inmunidad antimonopolio en EEUU para formar un negocio conjunto transatlántico con Air France y KLM que supondrán unos ingresos estimados en 12.000 millones de dólares, afirma el Financial.

El acuerdo de "cielos abiertos" entre la UE y EEUU entró en vigor este año, que permitirá poner fin a la mayor parte de las restricciones impuestas durante años a las aerolíneas que operan entre las dos orillas del Atlántico.